viernes, 20 de enero de 2012

DosMilDoce.

  
  Un poco, bastante, retrasado. Después de idas y vueltas, de negación y aceptación. Negociaciones y demás... Me decidí a pensar en mi, y en lo que seria "mi contexto de vida" (Lease "contexto de vida" a; situaciones, lugares y gente que me rodean/rodearon tanto en momentos pasados como actuales). Enfrentada con un fin de año movido, mezclado, y clave, comencé a carburar. Y... decidí el CAMBIO. Cuan Ramonsito Mestre en campaña política de años anteriores. Chasquido y CAMBIO! Palabra clave. Y fue ahí que recurrí a muletillas trilladas de viejas y nuevas publicidades, típicas de fin de año. El famoso: Hola a tal cosa, chau a tal otra. Entonces dije; Hola a la buena vibra. Chau a los rencores (...o casi todos.) Hola a la actitud, mas reforzada. Chau a miedos irracionales. Hola a la gente nueva, con buena onda. Chau a los sentimientos ofensivos para uno mismo. Hola a los cambios. Chau a lo monótono... entre otras cosas. Pero todo seria algo así como un proceso. Muchos dicen que la gente no cambia, o que eso de que llega "fin de año" y todos usan  eso de excusa para "cambiar". Yo dije muchas de esas cosas, pero cambio de parecer. Entonces vale cambiar. Y aunque si sea una excusa lo de la fecha. Me sirvió, cambio de energía, lo mas que se puede. Me gusta.  Y estoy contenta con eso. Así que, como dijo alguna vez Mestre: CAMBIO!  (vamos a ver cuanto me dura). Y ahora para cerrar, esta nota tan sin sentido y amena a la vez; el fachero de Mestre y una mano simulando un futuro chasquido (no encontré la fusión, de ambos)....









Y que conste que no soy radical,
pero que es "fachero, es fachero."

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