Sigo caminando solo, uoh oh oh.

  Por ahí esta bueno eso, de salir a caminar, de quedarse solo, con la tranquilidad de saber que es solo por un momento. Caminar. Pensar, ir separando las cosas que en nuestra cabeza dan vueltas, una por una, analizar. Penar, bien dije. O también, escaparse por un ratito a dejar de pensar, a solo imaginar, o mente en blanco. Recordar. Son lindos esos momentos en los que uno se encuentra, por así decirlo, con uno mismo y empieza a darse cuenta que todavía sigue vivo, que sigue ahí. Un ser racional, un ser con ganas de sentir, de vivir, de soñar... Que siente, que cree, que le gustan cosas, que todavía recuerda todas esas canciones de cuando era chico, que las mezcla con las de mañana. ¿Porque no? Estaría mejor, hacerlo mas seguido, nuestra esencia se remarcaría ocupando el lugar que siempre debe ocupar, EL LUGAR, un lugar.

Y si... del barrio de Alberdi yo soy!

Nunca 

nadie;

me dio 

 tanta Luz

Si empiezo a desconfiar de mi suerte estoy perdido, pues tengo ideas cada vez menos atrevidas. Pero cerca, aquí cerca el lobo aúlla despertando al mal hombre, al mago bueno. Con un corazón que no puede cumplir más promesas ya. Los genios son buenos servidores y malos amos. Si les has visto primorosos: caíste en el lazo. Tu bolsillo es más profundo que su gracia y calcular su coraje  puede llevarle la vida. A un corazón que no puede cumplir más promesas ya. Yo te saqué un día de allí y me encadené. Te obedecí hasta donde pude; mi genio amor. Me pude apartar de tu corazón en otro crimen más, y me alejé de tu seducción y tu dulce voz. Tu dulce voz. 

Carlos Solari.

tan tierna y dura a la vez.

aun siguen vivas, en mi.

como aliento yo; con el corazón.

Hoy 
en mi pecho 
siento 
el recuerdo 
de tu calor.

Banca un toque!

 Esperando... Esperando se te pasa el tiempo! Me dijo. Pero es que, no entendía. Eso mismo quería; que se pase. Dicen que es uno de los mejores remedios, ese del tiempo, y no nos quedaba otra que probarlo. Esperando que esté la comida, esperando esa juntada, esperando que se sanen las heridas, esperando olvidar el dolor o la impotencia de la perdida. Esperando que bajen los precios, esperando que llegue el fin de semana, esperando escuchar ese tema, esperando el de local. Sin darnos cuenta; eso siempre hacemos... Esperar. Mientras hacemos cosas, que a lo mejor antes también esperábamos, comenzamos a esperar otras. Y entonces ¿ Que tiene de malo esperar? No se te pasa la vida, no se te pasa el tren, si al fin y al cabo todo se trata de esperar.. Al margen de lo que hacemos en ese momento, seguimos en la espera. Me fumo un pucho mientras la espero... Y minutos antes, cuando ni yo había llegado, me decía; apenas llegue me fumo un pucho.  Anhelando siempre, eso que nos falta, eso que no llegamos a hacer, eso que no llego. No digo que no disfrutemos el hoy, pero ¿porque siempre terminamos esperando? ¿Será malo? ¿Esta bien? Nose, pero espero respuestas...

UN ABRAZO Y UN GRACIAS, ETERNAMENTE EXTENDIDO.