Todo como ayer. En su defecto, antes de antes de antes de ayer, o por ahí. Que locos que son esos piyos de los "Ánimos". Una manada ( ¿seria? ) de locos. Vienen y se van. Se mezclan se mueven y se ponen de pie. Corren como con miedo y se vuelven a acomodar. Y son tantos, que nose, seria como sin-cuenta ( Chistes viejos, si que los hay).
Mucho se dice de ellos, aveces ni se los puede entender; como aveces también se pasan de revolución u otras tan calmos se los siente. Ahora, por estos lados, están en su estado habitual. Son un poco limados, la mayoría del tiempo, pero ellos son los que casi siempre me marcan como soy, o tal vez me ayudan a ver que siempre se puede estar mejor. Que capaz ayer no se podía sonreír del todo bien, pero que hoy ellos van a ayudarme a recordar todas esas cosas, que siempre me hacen bien. Simpleza de algunos, que nos hace mas perceptivos tal vez. Un sensibilidad rara la mía, pero la acepto de tal forma que yo y mis ánimos estamos contentos de conocernos y hoy reírnos de ayer y poder decir: "dale dale dale, para adelante nomas!!! Para adelante, que de acá todavía no se ve, a donde vamos a papar."
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