Viste cuando sentis que te ahogas, que el agua desborda y vos no podes nadar. Aveces es duro el poder salir a flote, necesitas algo que te haga tomar impulso, algo que te lebante y te llebe hasta la orilla, una especie de Salvavidas. Pero no para salir y helarte, si no para empezar de nuevo. Acomodarte, respirar ondo y seguir nadando, seguir recorriendo, nose si naufragando o siguiento alguna dirección, pero si es necesario seguir.
Capaz sea mucho el decir que cada uno nevega en un mar, por lo infinita dimención que tiene esa palabra, pero es valido decir (para a mi) que cada uno navega en su propio mar. Las dimenciones varian, segun lo recorrido, lo soñado, lo experimentado. El mio, no es taan grande, pero tiene su lugar. Su espacio. Mi alma suele incomodarse de vez en cuando, pero nada para preocuparse.
Ahora bien, volviendo con lo anterior, el tema de cuando te sentis ahogada y a punto de reventar... Me di cuenta de que encontre mi salvavida, es decir, existe más de uno a la orilla de mi mar, pero hace unos instantes cai en la cuenta de uno nuevo. Ese que sabia de su existir, pero no de lo necesario e importante que era.
Esta bueno tener esos salvavidas, te hacen bien, te ayudan. Te dejan tomar fuerzas para continuar. Y es que confio muchos en ellos, y eso no es poca cosa si?